El exembajador de Estados Unidos en Bolivia Víctor Manuel Rocha compareció ante una corte federal en Miami ayer, enfrentando cargos por trabajar como agente del gobierno cubano durante más de cuatro décadas. Políticos bolivianos opinaron sobre el exdiplomático.
Al respecto el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, llegó a la certeza de que el ahora detenido favoreció a Evo Morales de manera intencional en las Elecciones Presidenciales de 2002.
Ese año, Rocha pidió a los bolivianos que no apoyen a Evo, porque Estados Unidos quitaría apoyo económico. La polémica declaración catapultó a Morales en las encuestas, y de tercero pasó a segundo lugar, sobrepasando con un margen estrecho a su entonces rival político y también aspirante a la Presidencia, Reyes Villa.
Para Manfred, Manuel Rocha propició el ascenso de Evo.
En respaldo, Jorge Quiroga consideró que Evo y Rocha eran "serviles colegas cubanos". Desde su cuenta en redes sociales, el expresidente Quiroga compartió sus reflexiones sobre lo que él denomina el "Rochazo", un fenómeno político que habría incidido significativamente en los comicios de 2002, donde Evo Morales obtuvo el segundo lugar, aunque la presidencia fue finalmente para Gonzalo Sánchez de Lozada.
Por su lado, el líder del MAS, Evo Morales, también dio su criterio y aseguró que Víctor Manuel Rocha gozó de "impunidad".
Dirigiéndose a los sectores de su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), leales al presidente de Bolivia, Luis Arce, del que está distanciado, también señaló "que aprendan los renovadores. Primero, cuando le conviene, el imperio los utiliza para perseguir, masacrar y reprimir al movimiento indígena y popular. Cuando ya no le sirve, los procesa y defenestra. Manuel Rocha, mientras era servil a Estados Unidos, gozaba de la impunidad y reverencia de los neoliberales. Ahora que cayó en desgracia, sus mismos aliados como Tuto Quiroga, lo atacan".
SOBRE ÉL
El diplomático estadounidense de origen colombiano fue arrestado el pasado viernes por supuestamente espiar para Cuba durante 40 años.
Se trata de Víctor Manuel Rocha, de 73 años, quien ocupó puestos relevantes en las embajadas de Estados Unidos, en República Dominicana, Argentina y Cuba, y fue Embajador de Estados Unidos en Bolivia entre 1999 y 2002.
Rocha enfrenta tres cargos: uno por conspiración, otro por actuar como agente de un gobierno extranjero y un tercero por usar un pasaporte obtenido mediante una declaración falsa.
El documento de la fiscalía sostiene que el acusado admitió sus “décadas” de trabajo para Cuba a un agente encubierto del FBI que se hizo pasar por representante de la Dirección General de Inteligencia cubana (DGI).
Antes de reunirse en persona, Rocha recibió un mensaje por la aplicación de mensajería WhatsApp que decía: “Tengo un mensaje para ti de parte de tus amigos en La Habana. Se trata de un asunto delicado”.
Las autoridades señalan que el exfuncionario contestó “no entiendo, pero puedes llamarme”.
En las conversaciones en persona, que ocurrieron en Miami y fueron grabadas, Rocha supuestamente contestó “sí” cuando el agente le indicó que había sido contactado para “establecer un nuevo plan de comunicación”.
El exfuncionario también le habría contado al agente cómo logró infiltrarse “poco a poco” en el gobierno estadounidense.
"Sabía exactamente cómo hacerlo y obviamente la Dirección [la agencia de inteligencia de Cuba] me acompañó... Es un proceso largo y no fue fácil", supuestamente le dijo al agente del FBI.
Y también se refirió a EE.UU. como “el enemigo”, utilizó términos como “nosotros” para referirse a sí mismo y al gobierno cubano, y llamó a Fidel Castro el “comandante”.