Mientras el presidente Luis Arce y su equipo entero de trabajo han escogido a Santa Cruz como su “casa” temporal desde la cual planifican acciones estratégicas contra los incendios forestales, surgieron algunas buenas noticias que alientan en la lucha contra el fuego. Por un lado, cayeron repentinas lluvias en municipios víctimas de los siniestros. Por el otro, el bombardeo de nubes ha abierto con éxito y se espera que caigan precipitaciones en las siguientes horas.
Ya Arce y todos sus ministros se instalaron en el departamento del oriente. Ese ha sido el anuncio dado el miércoles y, precisamente, ello mismo ocurrió ayer, cuando el Ejecutivo se concentró en El Trompillo a fin de poner la lupa en la coyuntura e ir diseñando tareas que sean funcionales y combatan las dañinas quemas.
Mediante un breve post en redes, el Jefe de Estado se encargó de confirmar la llegada del grupo y de dar cuenta de la primera labor: efectuar un vuelo para descargar litros significativos de agua en las áreas afectadas de la Chiquitanía y la Amazonía.
De hecho, en dicho sentido, el gabinete ha dispuesto el envío de aviones para que descarguen agua en las zonas que son arrasadas por las llamas.
En cuanto a las noticias parcialmente alentadoras, vale darles crédito a las lluvias que cayeron en municipios seriamente comprometidos con el fuego: las precipitaciones se hicieron presentes en la comunidad de Las Petas, en el municipio de San Matías; en la colonia Chihuahua, del municipio de Cuatro Cañadas, en el municipio de San Ramón, San Javier, en la comunidad del cerro de Concepción, en Pailón, y en Urubichá.
DISIPAN HUMO, PERO NO BASTAN
Claramente, las lluvias de la madrugada de ayer fueron un aliciente en medio de la angustia y la desazón que enfrentan los bomberos en el oriente boliviano, región aquejada desde hace ya tres meses. Sin embargo, si bien es cierto que han ayudado, sobre todo en la disipación de gran parte del humo denso, la intensidad de las aguas no ha sido suficiente como para aplacar algunos focos activos.
La Gobernación de Santa Cruz, comandada por Mario Aguilera, confirmó la información mediante su Sistema de Información y Comunicación (SIC). Esta dependencia apuntó que las lluvias han sido sectorizadas y que, por infortunio, no han alcanzado satisfactoriamente municipios en donde los incendios no dan tregua.
SIEMBRA DE NUBES De todos modos, la esperanza ahora se centra en los resultados que puedan mostrar los bombardeos de nubes ejecutados ayer por el Ministerio de Defensa en los municipios de Concepción y Ascensión de Guarayos. A decir del viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, “se han realizado 42 disparos (con) 169 cartuchos de yoduro de plata; y se han podido contar entre 18 y 25 conformaciones de nubes que tienen las características adecuadas para generar lluvia artificial”.
Según la autoridad, este procedimiento fue preparado “hace tiempo”, pues ya calculaban las posibles nubosidades que pudieran volver factible el desarrollo de la tarea aérea.
El Gobierno tiene esperanzas y confía en que el bombardeo surta efectos pronto. “Estamos seguros de que este operativo va a coadyuvar a todos los trabajos que venimos haciendo con la finalidad de sofocar los incendios”, expuso Calvimontes, en consonancia con ABI.
Los daños en el oriente del país ya sobrepasaron las 3.3 millones de hectáreas calcinadas, dejando la pérdida de vidas de animales silvestres como osos perezosos, entre otros.
Ante la emergencia, la Gobernación ha convocado a biólogos y veterinarios a sumarse a la cruzada y atender a los animales sobrevivientes del desastre. Y para que los voluntarios no tengan problemas de traslado, Boliviana de Aviación (BoA) habilitó vuelos sin costo para estos profesionales.
La campaña se llama “Por los que no tienen voz: MMAyA, BoA y Veterinarios en Acción". El primer vuelo ha sido programado para el lunes 16 del mes en curso. Es preciso tener en cuenta que las salidas se efectuarán cada 15 días.
8 PROCESOS PENALES
La Procuraduría General del Estado (PGE) interviene en ocho procesos penales impulsados por la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierras (ABT). También supervisará 66 denuncias en torno a la naturaleza.
El grueso de estos procesos se concentra en el departamento de Santa Cruz. Hay cuatro en Guarayos, uno en San Ignacio de Velasco, uno en Roboré, uno en Puerto Suárez y otro en Trinidad.